Resfriados frecuentes, ¿Cómo puedo ayudar?

Tengo dos hijos, uno de 5 años y otro de 7. Todos los años, al empezar el colegio y durante los meses más fríos, me cogen varios resfriados. ¿Puedo ayudarles con la Naturopatía para que esto no suceda?
Las enfermedades comunes de la infancia son catarro, gripe, infección del oído, sinusitis, bronquitis, alergias, asma y eczema. La medicina china y la Naturopatia pueden ser muy beneficiosas para todas estas enfermedades.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que los resfriados son una manifestación natural del organismo frente a los cambios climáticos entre verano e invierno. Cuando el organismo está bien cuidado y en equilibrio será capaz de adaptarse fácilmente a estos cambios. Cuando el organismo está deprimido (por causas emocionales, mentales, espirituales o físicas) tendrá dificultades para adaptarse y de esta manera aparecerá en desequilibrio de salud que este en consonancia con la parte del organismo deprimido. Esto es lo que conocemos como enfermedad.
Fortalecer el sistema inmunológico es lo que cualquier persona con orientación de salud natural le va a recomendar, esto puede disminuir la gravedad y la aparición de la enfermedad. Un buen profesional como los que nosotros formamos tanto en Naturopatía como en Medicina China además de indicarle grandes remedios (como los que le aconsejo un poco más abajo) le va a orientar a procurar para su hijo un tratamiento no solo dirigido a tratar el síntoma de forma natural, sino que debemos buscar la causa que mantiene a este órgano/s deprimido para evitar este estado de desequilibrio frecuente.
Debemos escuchar al cuerpo y darnos cuenta que si el organismo nos llama la atención frecuentemente de la misma manera (resfriado o cualquier otro desequilibrio de salud) es porque nos está pidiendo ayuda con algo con lo que él solo no puede. Cuando conducimos nuestro coche y se enciende una luz en el cuadro de mandos que nos indica un desequilibrio en sus funciones naturales, lo llevamos al taller. ¿Por qué al cuerpo no? ¿Cuál es la diferencia?
Para fortalecer el sistema inmunológico y como tratamiento alternativo, hay opciones tanto alimentarias como de herbología:
El caldo de pollo se ha utilizado para tratar los resfriados comunes durante siglos y realmente puede ayudar. Investigadores en el Nebraska Medical Center en Omaha encontraron que la sopa de pollo tiene propiedades antiinflamatorias suaves que pueden acelerar la curación. Esta sopa también alivia la congestión nasal y la irritación de las vías respiratorias.
La miel y el limón son una combinación clásica y efectiva para hacernos sentir bien y aliviar el resfriado (no se aconseja a niños menores de un año, por el riesgo de botulismo). Estudios recientes confirman que la miel trata la tos mejor que los jarabes para la tos. Una cucharadita de miel con el jugo de medio limón, mezclado con una infusión o agua templada. El líquido alivia los síntomas y provoca que la nariz se descongestione, el limón aporta vitamina C y la miel es un antibiótico natural que ayuda a luchar contra posibles infecciones.
La Jalea real refuerza el sistema inmunológico y da vitalidad por lo que es un suplemento que ayuda a aumentar las defensas frente a los cambios de temperatura y prevenir resfriados. Es ideal para temporadas en las que se necesite un aporte extra de energía. La jalea real contiene un péptido (sucesión de aminoácidos) con propiedades antibacterianas activo frente a bacterias. Junto al própolis, otro antiséptico natural fabricado por las abejas, es una excepcional ayuda en le prevención de infecciones.
El Própolis o Propóleo y la Equinácea pueden tomarse de forma preventiva en épocas de frío, cuando el riesgo de contagio es mayor, pero también pueden administrarse como tratamiento una vez que aparecen los primeros síntomas del resfriado común.
La Equinácea es un excelente antibiótico natural, sus principios activos ponen en marcha una serie de procesos en el organismo que aumentan la capacidad de respuesta del sistema inmunitario.
El Própolis es muy útil para combatir afecciones respiratorias, como catarros de vías altas, gripe, sinusitis, laringitis o bronquitis. Se utiliza tanto para prevenir (fortaleciendo nuestro organismo) como para tratar estas y otras afecciones.
Recomiendo siempre la consulta a un buen profesional, para una orientación adecuada en el consumo de suplementos.
Jose González Castro
Naturópata